Es una cuestión compleja y que admitiría muchas respuestas; yo os voy a exponer simplemente mi visión particular de este tema. Ésta es la cualidad fundamental en un Ama pues todo complejo mental no deja de ser una herida psíquica que acaba sangrando y haciendo sufrir a quienes la rodean al imaginarse cosas que no son o al magnificar cosas que tal no merecen. Tiene la capacidad de influir de forma dominante en las personas del mundo BDSM que la rodean y tales capacidades dominantes se le notan de forma evidente. En definitiva, que despida autoridad. Es capaz de proyectar esas cualidades sobre todos aquellos que entran en el mundo BDSM desde una perspectiva de sumisión y, en particular y de manera directa, sobre aquellos sumisos que ella ha elegido. Disfruta en gran medida con sus acciones de proyección de poder. Dominar es el placer de hoy, educar es el placer del mañana. En definitiva, debe ser responsable.
Feminismos , Protagonistas Las luces se apagan de golpe. Las palabras emotivas de la anfitriona resuenan en todo el salón. La quinceañera baja de un escenario llorando, abraza a su artífice que camina junto a ella y abre el baile de la confusión con un vals. Un cambio de época Ana tiene 16 años. Estudia en una escuela privada y laica de Barracas. Su grupo principal de amigas es del Colegio Nacional Buenos Aires, donde asistió hasta hace algo tiempo.
Al final concretaron que los y las sumisas iban a estar disposición de los y las Dominantes que lo quisieran. Se pasó a todos y todas las Dominantes los límites de los sumisos y se estableció una palabra de seguridad. Dependería de la disponibilidad de cada uno. Los que no deseasen quedarse muchas horas podrían irse cuando quisieran. Pelo castaño. Cara de no haber roto un plato. Pechos pequeños pero acordes a su constitución.