Uno de los logros de la International Wages For Housework Campaign Campaña Internacional Salario por Trabajo Domésticoque lanzamos en los setenta, es precisamente que se desenmascaró no sólo la cantidad de trabajo que las trabajadoras del hogar realizan para el capital, sino que con ello, también señalamos el potencial poder social que este trabajo les confiere, ya que la labor doméstica reproduce al trabajador y por lo tanto, es el pilar de cualquier otra forma de trabajo. Todavía son las mujeres las que realizan la mayor parte de las labores no asalariadas en casa y estas no han sido nunca precarias. Al contrario, el trabajo doméstico sigue siempre presente, incluso en vacaciones. Sin embargo no estoy de acuerdo con esta posición.
Algunos historiadores norteamericanos fechan la aparición de la crisis masculina en Estados Unidos en la década de los 80 del siglo XX Kimmel, ; otros a partir de Filene y Peter G, Crearon clubs femeninos, enviaron a sus hijas al colegio y comenzaron a trabajar fuera de apartamento. Reclaman el derecho al divorcio, y el derecho a votar. Badinter, También cabe señalar la influencia de los planteamientos psicológicos y psicoanalíticos en las investigaciones sobre masculinidad realizados en Latinoamérica, especialmente en Argentina, donde se ha prestado un interés particular a la subjetividad masculina y a las relaciones de los niños con sus progenitores. Es en los 90 cuando los medios de comunicación masivos comienzan a prestar atención a este aberración. En EE. Esta decadencia puede anatomía debida, se comenta en el gacetilla, al verse los hombres progresivamente sobrepasados, en todo el Occidente desarrollado, por una imprevista e inminente supremacía femenina. Gil Calvo,