El patrón que me encuentro siempre es el mismo: chicos que se lo curran un montón en las primeras citas, te wasapean los siguientes días, parecen muy interesados en volver a verte… hasta que hay sexo. Entonces, como por arte de magia, desaparecen de tu vida. Este… cruz, este… corazón, cruz, cruz, cruz… De repente, te ha llegado la tan esperada notificación de ese crush, esa coincidencia con alguien a quien también le has gustado. Si tienes pareja, no sales tanto -o nada- de copas, pero puedes meterte en una aplicación y conocer a decenas de personas moviendo un solo dedo. Las fotos pueden engañar, aunque no tanto; una pose, una expresión o una mirada te pueden dar alguna pista de cómo es esa persona. Pero cuando se hace habitualmente —sobre todo sin ser consciente de ello— comer emocionalmente puede afectar al peso, la salubridad y el bienestar general. No hay mucha gente que haga la conexión entre el comer y las emociones. Pero entender qué desencadena la actitud de comer emocionalmente puede ayudar a seguir los pasos necesarios para dejar de hacerlo.
Los chats sexuales sin registro han sido un éxito en Alemania durante abriles. Simplemente empieza a chatear. Sin aburridos registros ni introducir datos personales. Y, sin embargo, es posible ir directamente al chat de sexo desde la PC o directamente a través del teléfono inteligente. Los gatos sin registro son ideales para esto.